jueves, 31 de diciembre de 2009
Sweet fifty-two
Sweet fifty-one
Supongo que durante este año me ha pasado de todo, muchísimas cosas. Pero por pereza, vageza o poca memoria solo me acuerdo de Junio, Julio, Noviembre y como no, Diciembre.Y no creo que me acuerde de Diciembre porque es el mes en el que estamos aún hoy, si no porque digamos que ha sido el mes más especial del año.
Quitando esto no se que más decir , que estos 365 no fueron buenos hasta el final, ahora entiendo el dicho ese. Feliz 2010
viernes, 25 de diciembre de 2009
Sweet fifty
Pero hoy, como si en cierta forma la vida hubiese estado esperando estos días para darle una lección gigantesca, había descubierto algo que le hacía sonreir fuese el momento que fuese. Ella. Abrió los ojos para ver los suyos y se dio cuenta de que, al fin y al cabo, se moría por todos y cada uno de sus huesos, de sus besos y de sus miradas.
jueves, 24 de diciembre de 2009
Sweet fourty-nine
Él era un ignorante, un ser estúpido que hasta ese momento fundamentó sus decisiones en jugar a cara o cruz. En basar tu vida en dos caminos, hasta que se dio cuenta de que no le gusta ninguno de esos dos caminos, de que el que él quieres está en el medio, y no sabe que hacer.
Tal vez solo se des cuenta de eso cuando está debajo del árbol, cuando ha robado una bola y no quiere que nadie le vea.
Cuando en un principio esa bola era para algo... que ya no recuerda. Idiota.
Tan idiota que aún ahora no lo entiendo.
miércoles, 23 de diciembre de 2009
Sweet fourty-eight
Algún día próximo se tendría que parar a pensar en toodo lo que había vivido este año 2009, pero desde luego ese día no iba a ser hoy. Hoy no podía pensar, hoy estaba en su modo OFF.
Would you lie with me and just forget the world?
Your perfect eyes, they're all I can see, off.
lunes, 21 de diciembre de 2009
Sweet fourty-seven
Saca un cigarro y lo enciende, apurando las caladas mientras siente una música lejana proveniente de dos o tres calles más allá. Oooouuh, ooooohhhh, uuuh, ooooooooohhhh, yeaaah! . Se ríe, no puede evitarlo. Hacía tiempo que no podía estar ahí sentado sin desear caer, sin estar tentado de terminar con aquel sufrimiento continuo. Pero ahora ya no es asi, total... aunque no se considera la persona más feliz del mundo aún, no se siente del todo desgraciado.
Una vez más... liberado.
Sweet fourty-six
Tras la risa empiezan a caer lágrimas al suelo. Plic, plic. Lágrimas que forman un río según va llorando con más fuerza, mientras dibuja una sonrisa en su cara. La sonrisa más triste del mundo. Una sonrisa de conformidad, ya que por fin había comprendido que toda su inconformidad era hoy conformidad, lo había aceptado. Su vida era esa, y su sentido era aquel, que ella fuese la razón de su sonrisa.
De su hoy triste sonrisa.
sábado, 19 de diciembre de 2009
Sweet fourty-five
Una mirada, un choque, unos segundos, una música, una situación, dos manos, cuatro ojos, miles de sentimientos.
Si algo quería ahora ya no era un cigarro, ni nada para colocarse. Ni si quiera una botellita de vodka que se podría haber comprado en cualquier tienda abierta a esas horas. Simplemente quería sus labios, una noche más, pegados a los suyos. Destilando en él la droga más tentadora de todas: su sabor. Su dulce y amargo sabor, indefinible.
Le bastó con que sus labios se rozasen una décima de segundo para que algo en su cabeza sonase. Crack, crack, ¡Piensa!
martes, 15 de diciembre de 2009
Sweet fourty-four
Angels with silver wings shouldn't know suffering.
¿Que era eso que sentía?, ¿Inocencia?, ¿Miedo?, ¿Impotencia?, ¿Mareo? No lo sabía, era una mezcla de tantísimos sentimientos que ya daba por perdidos. Desde que ella estaba en su vida se había sentido confiado, capaz de todo y seguro, pero cada mañana que la veía sentía esa mezcla de nuevo. Recuerdos de un viejo sentimiento poderoso: amor.
Precious and fragile things need special handling.
Su poder era increíble, le volvía bobo. Le dejaba K.O. en un segundo, en una mirada. Y en los mil y un sentimientos que él trataba de trasmitirle a ella, aunque se perdiesen en la distancia que le separase y se los llevase el viento frío, impidiendo que ella nunca se enamorase de él.
I'll wait for tomorrow.. too late to wait another day.
Your precious time.
viernes, 11 de diciembre de 2009
Sweet fourty-three
Un año, en el que no me arrepentí de nada, y llevo deseando que llegase este día para poder decirlo: serás siempre uno de los mejores recuerdos de mi vida.
She was the one.
jueves, 10 de diciembre de 2009
Sweet fourty-two
Era un ser melancólico, con una visión particular de la vida y soñador hasta puntos insanos. Que nunca podía ser feliz completamente, puede que fuese por su melancolía... o puede que fuese el hecho de que le había prometido hacía ya dos años que aunque la olvidase ella siempre sería la razón de su sonrisa.
martes, 8 de diciembre de 2009
Sweet fourty-one
Si, seguía sin encontrar el sentido a nada, pero al menos tenía una mano que le guiaba y le ayudaba, y podía cerrar los ojos y dejarse guiar. Porque sabía que confiaba en ella.
Tal vez hoy llueva, pero hoy tendrá un paraguas para cubrirse, y cuatro manos para sujetarlo.
lunes, 7 de diciembre de 2009
Sweet fourty
¿Como podían pedirle que un día como hoy fuese normal?, ¿Que se comportase como siempre, como si nada hubiese cambiado y todo siguiese el ritmo?
Podía haberlo hecho toda esta semana, había estado en un mundo feliz del que parecía que nadie podía bajarle, pero visto lo visto si, hasta volver a dejarle sin sueños, mirando el techo como lo había hecho tiempo antes que ya le parecía muy lejos.
Una noche de las que hacía tiempo echaba de menos, donde le pesaba todo el cuerpo, le dolía el corazón y deseaba la paz en cada una de sus lágrimas.
Hoy va a llover. Os lo aseguro, lloverá.
Sweet thirty-nine
domingo, 6 de diciembre de 2009
Sweet thirty-seven
Y no quería eso, realmente no lo quería, realmente se odiaba. Necesitaba desaparecer ya, aunque ya no fuese por su paz, que el resto del mundo si pudiese celebrar su muerte.
Ahora aquel insignificante era un autentico estúpido.
Sweet thirty-six
Por mucho que una persona le pudiese hacer daño, y por mucho que le costase levantarse después de caer por su culpa, por muchos malos días y por muchas lágrimas que pudiese derramar por una persona, cuando pasaban todas esas absurdas fases del odio y el rencor llegaba una etapa en la que solo intentas que en tu mente se queden los buenos recuerdos, los recuerdos de un día en el que te hicieron sentir casi tocar el cielo con los dedos, sentir como podias sonreir porque no habia nada en este mundo que en esos momentos te hacia sentir triste. Y esa es la magia de las cosas, las que aunque todo vaya mal nos hacen reir. La que permanece en nuestra memoria para recordarnos que por muy mal que esté todo, hubo una vez donde estuvo bien, donde fue insuperable, y que eso puede volver a pasar, y pasará.
Tal vez esto pruebe que la magia de la vida está en las pequeñas cosas, aunque parece ser que hoy en día ya nadie se para a ver esos pequeños detalles, esas pequeñas sonrisas, esos pequeños gestos.
She was the one.
viernes, 4 de diciembre de 2009
Sweet thirty-five
Pero si ahora lo pensaba bien... fumar no era tan malo, era su pequeño vicio. Su evasión.
Sweet thirty-four
miércoles, 2 de diciembre de 2009
Sweet thirty-three
A pesar de que sabía que ella y él no se conocían de nada, absolutamente de nada y lo máximo que podía saber era su clase, al verla caminar no podía evitar que su tranquilidad le pareciese familiar, hasta dulce. Tal vez no podría hablar mucho de sus labios, porque no se había fijado mucho en ellos, cuando pasaban cerca y la miraba lo hacía a los ojos, y ahí si que realmente, y por un chispazo que apenas duraba unos segundos, sentía que la conocía desde que había nacido, y que eran él uno para el otro, que siempre habían estado esperandose, en una vida vacía a la cual el otro podría dar sentido. ¿Y quien decía que no? Pero claro, quien sabe que pasaba por la mente de ella...
martes, 1 de diciembre de 2009
Sweet thirty-two
Le encantaba su palidez, sus ojos negros, sus labios, su mirada, su forma de caminar, de moverse, su voz, todo. Le encantaba. Y tenía ese maldito poder para volverle estúpido y dejarle sin palabras, para dejarle mudo y poner su corazoncito a mil. Ese efecto que tan poco le gustaba. Al fin y al cabo aunque fuese insignificante era una persona de ideas claras, y ella desmontaba su mundo, lo ponía del revés y lo batía para que su cerebro al igual que una Coca-cola se desbordase a la hora de pensar.
Tal vez no fuese aún demasiado importante, pero le daba fuerzas para levantarse cada mañana a cuatro grados y ponerse el iPod con esta canción:
It´s really good to hear your voice saying my name, it sounds so sweet coming from the lips of an angel. Hearing those words, it makes me weak.
Sweet thirty
Everytime I look into your eyes, I know it only comes once in life, and now my hearts gone cold.[...] I don't wanna be without you now, I just wanna be with you tonight.
Me paso el día y la noche soñando con que quizá al día siguiente si me atreva a no solo mirarla, si no también a decirle algo... pero pasa la noche y llega el día, y no le digo nada, y pienso mañana será.
Siempre espero que den ese paso por mi, y ya no hay nadie que haga eso por mi... realmente solo te das cuenta de que has hecho algo mal tiempo después, pero eres un gilipollas si, aun sabiendo que un día lo hiciste mal, al siguiente lo repites.
Y mi mente siempre me dice lo mismo, a cada minuto, me vuelve loco.
Are you ever gonna do that?
Hoy soy un insignificante... bastante gilipollas.
sábado, 28 de noviembre de 2009
Sweet twenty-nine
Pero él no podía hacer nada, más que quedarse quiero y mirarla, esos ojos cristalinos que tal vez no dijesen nada, pero él entendía como la sinceridad absoluta.
Sweet twenty-eight
Y maldigo una y mil veces esta distancia que va de tus manos a mis manos, es entonces cuando más te pienso, es entonces cuando más te sueño, es entonces cuando más te quiero.
Busco a mi alrededor y no encuentro nada, no veo nada que no sea esta distancia, nada que no seas tu y esta distancia.
Me pregunto y te pregunto, si te puedo tener sin tenerte y tocar sin tocarte, si es posible no verte y mirarte.
[...]La esperanza de nunca perderte, la esperanza en que este sueño dure cuanto menos para siempre.
Y maldigo cada segundo que no paso a tu lado, cada instante en que quiero y no puedo, es entonces cuando más te pienso, es entonces cuando más te sueño, es entonces cuando más te quiero.
Busco a mi alrededor y no encuentro nada, no veo nada que no sea esta distancia.
martes, 24 de noviembre de 2009
Sweet twenty-six
Que tonto, sabía que ella era todo lo que buscaba y no se detenía a contemplarla ni un minuto. Era un cobarde, pero al pasar a su lado tenía una sonrisa de oreja a oreja. Menuda mierda esto del mundo del corazón, ¿Eh? Pero la verdad es que desde hacía mucho tiempo necesitaba sentirse vivo, y sonreir sin saber porqué. Hoy era ese día, y por eso recordaría el 24 de Noviembre como una fecha importante, quizá tanto como su amado dieciséis.
lunes, 23 de noviembre de 2009
Sweet twenty-five
De tantas como había producido no pudo evitar que una de ellas entrase en su boca, sabían saladas, tal y como esperaba.
Al menos eso le distrajo unos minutos, y le permitió desconectar, un lujo que últimamente no se permitía con mucha frecuencia. Se preguntó como sabiendo que dentro de él había organos y todo eso podía sentir un vacío tan grande en su estómago.
Hacía unos minutos se había preguntado qué era el ánimo, pero por mucho que lo intentaba comprender era algo que escapaba a él, demasiado complicado. Hoy no tenía ganas de pensar.
sábado, 21 de noviembre de 2009
Sweet twenty-four
Si, hoy era Noviembre y un día más no era el idoneo para él. Tal vez mejoraría según el día fuese avanzando, quien sabe si al llegar la noche tal vez sería el hombre más feliz del mundo. Pero ahora, tras haber estado mirando el cielo desde un pequeño cubículo que era la terraza de su casa, se sentía un ser pequeño, inútil y despreciable, INSIGNIFICANTE.
Y veía el mundo desde un cristal, que cada vez que lo deseaba tocar se daba contra un cristal irrompible, que no le permitía más que ser un burdo expectador de un mundo que de vez en cuando le daba nauseas y de vez en cuando le obligaba a producir verdaderos gritos de pena por no poder ser partícipe en él.
miércoles, 18 de noviembre de 2009
Sweet twenty-three
Pero mientras tanto, mientras no te llaman cobarde, sabes que lo eres, porque sigues aquí, con una lágrima corriendo por tu mejilla, sintiendo en la garganta como tu corazón late, haciendo de ese sonido la nana que cada noche te calma y te deja descansar, lo que tanto necesitas. Mente en blanco. Paz.
Sweet twenty-two
Quería sentir el mar en calma y ver el cielo azul, pensando que su única preocupación es si el día de mañana sería mejor que el de hoy, pero... donde él vivía el mar nunca estaba en calma, siempre había una ola, un animal o una roca que entorpecian su camino... nunca tenía un minuto para respirar y decir: tal vez hoy si.
martes, 17 de noviembre de 2009
Sweet twenty-one
Sweet twenty
Quería un descanso, pero por una vez ese descanso no era ilimitado, simplemente necesitaba unas vacaciones duraderas, como cuando dormía y apagaba el cerebro, pero durante muuchas más horas, hasta resetear la memoria... ¿Era eso posible?
sábado, 14 de noviembre de 2009
Sweet nineteen
Y el muy estúpido de él se fijó en ella, aunque quizás se estuviese equivocando
viernes, 13 de noviembre de 2009
Sweet eighteen
Si, no se sentía estúpido, hoy lo era.
jueves, 12 de noviembre de 2009
Sweet seventeen
Que verdad, que triste realidad surgió de la nada y se alza ante mí. Me siento pequeña, pero nunca más confiada.
Como fue, ¿Qué tal la sensación de ver cómo ardían por ti mis manos en el fuego? Ya nada será igual es el final de la inocencia.
Iba a hacer una canción cruel escrita en tu honor que sacara de mí este veneno, pero en un sueño vi tu alma destrozada. Y al despertar lloré...
Un vuelo kamikaze a la eternidad.
Sweet sixteen
En lugar de sonreir se quedó quieto, como una marioneta que ya no usan y cerro los ojos. Jugó a soñar que volaba. Se sintió libre como nunca en toda su vida lo había hecho, sintió que podía tocar el cielo con la punta de los dedos si estiraba la mano.
Abrió los ojos y la vio, estaba frente a él y le estaba tocando la mano, ella era el cielo que tanto jugaba a tocar. Sonrió y se echó a llorar. Ella como siempre, destrozando su puta fé y volviendole loco.
No need to laugh and cry, hoy se sentía un poco insensible y solo necesitaba descargar en silencio.
domingo, 8 de noviembre de 2009
Sweet fourteen
Pero bueno, que más daba eso ya hoy, él solo quería caminar por la calle mientras sentía con cada respiración como sus pulmones se congelaban con el aire frío.
Oh si, eso le hacía sentir vivo.
Sweet thirteen
Inconforme. adj. Hostil a lo establecido en el orden político, social, moral, estético, etc.
Tal vez como siempre, palabras muy difíciles de ser explicadas por un diccionario, el cual se debe encargar de darles una vision objetiva dependiendo todas ellas de la visión de la persona que las está leyendo. El ser conforme o inconforme depende totalmente de cada uno y su visión de conformidad.
Yo siempre me he considerado inconformista con todo lo relacionado a la vida, en que no me gustan cientos o tal vez miles de cosas sobre ella, pero cada día que pasa me doy más cuenta de que soy inconformista porque me falta lo único que le pido a la vida, porque me falta lo que quiero, porque hoy tal vez me he dado cuenta de que a su lado me volvería conformista. ¿Quien sabe si el amor nos vuelve, a la par que locos, conformes?
Sweet twelve
Él era un chico rubio, de piel muy clara, excesivamente delgado para su altura, de ojos grises totalmente inexpresivos. Siempre llevaba unos cascos grandes, antiguos y bastante rotos a los que se les caian las almohadillas para los oidos, solía vestir una chaqueta de chandal totalmente roja con el color bastante perdido de tantos lavados y unos vaqueros. Tenía una irremediable manía, llevaba cada día desatado uno de los cordones de sus deportivas blancas viejas, esa era su única manía.
Vivía desde el día en que nació en Norwich en la misma pequeña casa, con un pequeño jardicito, propiedad privada de sus padres, los dueños de la casa. Su habitación estaba en el segundo piso de la casa y la cama donde solía pasar cientos de horas muertas leyendo libros estaba encajonada en la esquina de la habitación. El escritorio con el ordenador desde el cual solía hablar con sus pocos amigos y algún conocido de la red estaba frente a la ventana.
Por la ventana cada mañana veía a su padre, al cual veía como un desconocido tanto como a su madre, coger el coche de su garaje para irse a trabajar, poco antes de que él, con su mochila colgada del hombro y su pelo despeinado, saliesen también de casa hacia el instituto.
Siempre que iba hacia el instituto pensaba lo mismo, cada día mientras caminaba sorteando charcos solo podía pensar en porqué en aquella maldita ciudad nunca salía el sol, porque siempre estaba oscuro y hacía tanto frío.
El instituto también era siempre la misma mierda, él solo tenía allí dos o tres personas, sus buenos amigos, pero solo ellos, el resto de personas para él eran completos desconocidos, gente con la que no quería hablar o que nunca habían sido importantes para su vida. Las clases también le parecían aburridas, todas iguales, horas que pasaba mirando llover por la ventana o dando con el bolígrafo en la mesa para contar cada uno de los segundos que pasaba y seguía allí.
Al fin y al cabo él quería llorar, se moría de ganas por ponerse a llorar, pero realmente no le salían las lágrimas, porque esa vida era lo que él siempre había querido, la tranquilidad y la monotonía. Hacía años que había decidido conformarse y abandonar la mayor parte de los cambios y la emoción en su vida, se había vuelto rutinaria.
jueves, 5 de noviembre de 2009
Sweet eleven
Solo quería estar con ella, abrazarla, mirarla, sentirla. Únicamente necesitaba besarla, devorarla, sentir que solo con ella podrían llegar a ser uno.
Tal vez realmente era su obsesión y tal vez le empezaba a preocupar que solo pudiese dormirse cada noche pensando en su mirada y en su sonrisa.
ELLA, ELLA, ELLA, tal vez si, tal vez ella lo era TODO para aquel insignificante hombre.
Sweet ten
Prefiere quedarse tirado en su cama, tocandose el pecho, buscando el latir de su corazón hasta dejar de sentirlo, hasta poder cerrar los ojos con total calma y una sonrisa impresa en los labios.
Tal vez la ignorancia a veces lleve a la sabiduría y la sabiduría a la ignorancia, sea como sea ese día él se sentía sabio, por una vez sabía lo que tenía que hacer y sabía que era lo que le rodeaba. Ahora solo le quedaba esperar.
miércoles, 4 de noviembre de 2009
Sweet nine
Sweet eight
Ese tipo de miradas son las que se quedan grabadas, las que después recuerdas y te hacen sentir especial, tal vez más lleno o más vacío de lo que lo estabas antes.
Las que te hacen sentir más vacío siempre son miradas de desprecio, pena, sufrimiento, dolor...
En cambio las que te hacen sentir bien pueden ser sentimientos habituales, pero te hacen sentir bien, querer sonreir sin tener acaso una razón para hacerlo. Especialmente dentro de este tipo están las miradas de afecto, las miradas hacia alguien que no consideras un amigo, pero tampoco quieres que lo sea. Que sientes que no te importaría tenerle un poco más cerca, conocerle mejor y desentrañar sus secretos, pero no que sea tu amigo, sino... algo más.
Las miradas pueden llevar a muchos pensamientos erróneos y también acertados, lo difícil es... acertar.
Looking into your eyes~
martes, 3 de noviembre de 2009
Sweet seven
Realmente dudo que esa sea una buena definición para la palabra tiempo, simplemente hay palabras que expresan algo demasiado profundo como para poder explicarlo con palabras, la mayoría son sentimientos como el amor. Pero en este caso el tiempo no es ningún sentimiento, y encontrarle una explicación satisfactoria e igual para todo el mundo realmente es algo que se me antoja imposible, realmente complicado.
Who can say why your heart cries when your love dies? Only time.
lunes, 2 de noviembre de 2009
Sweet six
Escribir, por ejemplo: "La noche esta estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.
Pablo Neruda, poema número 20. Veinte poemas de amor y una canción desesperada.
Sweet five
Al fin y al cabo descansar era lo que necesitaba, estaba cansado de ser tan humano, con tantos sentimientos y tantos comederos de cabeza. Simplemente quería paz, no hablar, no actuar mostrando un papelón que no era realmente como se sentía, sin que nadie cuestionase su forma de ser ni se preocupase por como se sentía, simplemente paz.
Para que con el tiempo consiguiese arracar ese grito de locura que le permitiría olvidarla tal vez para siempre, aunque para ello tenga que pagar un precio tanto algo como su cordura.
Ya que ella siempre había sido su maldita cordura, al fin y al cabo... ¿No era la dueña de su corazón?
STOP, i'm insignificant.
domingo, 1 de noviembre de 2009
Sweet four
Lujuria. (Del lat. luxurĭa). f. Vicio consistente en el uso ilícito o en el apetito desordenado de los deleites carnales.
Si dijese la razón exacta de porque adoro el día uno de Noviembre, asi como todos y cada uno de los días de este mes tendría que decir que es por un tema de lujuria.
Y si tuviese que explicar como fue mi día de ayer diría que estuvo basado en la lujuria, en el vicio y en el descontrol. Tabaco, alcohol y tal vez dosis de cariño, entre las cuales estaban unos labios con carmín rojo que como siempre me volvieron loco y que por una noche acabaron junto a los mios, perdiendose en un beso dulce. Labios que me dejaron un sello de carmin en mi cuello que aún perdura hoy, labios que dejaron un olor en mi ropa que no quiero que desaparezca nunca.
Pero la lujuria es la lujuria, y desgraciadamente lujuria no es sinónimo de genialidad, es como una moneda, tiene dos caras. Esos labios eran la cara buena, otros labios fueron la mala.
Bienvenido dulce Noviembre.
sábado, 31 de octubre de 2009
Sweet three
Cuando estamos felices escuchamos una canción alegre y nos animamos mucho más, e incluso podemos llegar a la euforia, acabar gritando y pegando gritos.
En cambio, cuando estamos bajos de moral o hundidos escuchamos una canción triste y aumenta nuestro dolor, nuestra pena o sufrimiento.
Pero... como todo en la vida hay pequeñas excepciones, cancones que por una determinada razón dejaron una profunda huella en nuestra vida, que nos hacen sonreir por pura felicidad, sonreir por añoranza de unos tiempos mejores o simplemente: llorar. En mi vida hay muchas canciones de ese estilo, pero solo existe una que me permita desahogarme los días que estoy mal y sonreir los que estoy bien, consiguiendo la mezcla perfecta y permitiendome asi sobrevivir solo con ella. Podría llamarlo la BSO de mi vida, y siempre agradeceré a la amiga que me la enseñó por haberlo hecho, aunque no alabe el grupo, la canción desde luego que si.
Tal vez sea una letra confusa y fácil de entender de dos modos completamente distintos, o su melodía con una carácteristica voz, lo que la haga tan esperanzadora y a la vez descorazonadora.
Por favor, escuchad SPIN de LIFEHOUSE.
miércoles, 28 de octubre de 2009
Sweet one
Últimamente nada tenía un sentido claro, y sentía que estaba viviendo en un mundo que tal vez se le quedaba grande, que tal vez exigía mucho más de lo que él, con su pequeña cabecita, podía dar. Y ya se había cansado de intentarlo, de intentar parchear sus errores, y de buscarles el remedio que no tenian, ahora pensaba dejarlos explotar.